Agencia EFE. 15/06/2011

De los 51 millones de envases de bebidas que se venden al día en España, aproximadamente uno por habitante, solo se recicla el 30%, según cifras de la Asociación Retorna, que respalda el sistema de devolución y retorno que contempla la nueva Ley de residuos, aún en debate.

En los países en los que ya se ha establecido el Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) se recupera el 98,5% de los envases que se venden, agregó la asociación, que puso Alemania como ejemplo. Retorna, que identifica reticencia ante el proyecto de los sectores que ya se dedican al reciclado de residuos, ha querido sondear la opinión de los usuarios sobre un sistema que recuerda algunas prácticas del pasado.

Durante un encuentro con prensa especializada en Medio Ambiente, Retorna presentó una encuesta realizada junto con la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), que cifra en nueve de cada diez los españoles que desean un sistema «más sostenible» de gestión de envases de bebidas. «No es un retroceso, ni volver al pasado, es abandonar la cultura insostenible de usar y tirar y racionalizar los recursos. Es transformar los residuos en recursos y dar valor a la basura», dijo a Efe Domingo Jiménez, uno de los coordinadores del grupo.

Si se apuesta por el «residuo 0», este es un primer paso que hay que adoptar, añadió tras recordar que el sistema actual no cumple con los mínimos de reciclaje de la normativa vigente. Y a quienes se pregunten dónde están las botellas que no se reciclan, un 70 por ciento de una cifra que al año alcanza 18 mil millones, Jiménez recomendó mirar a las playas, los parques, al entorno natural, «porque suelen ser envases de productos que se sacan de paseo, que no siempre se consumen en casa».

Nueve de cada diez entrevistados, de una muestra de 2.006 consultados mayores de edad, de todas las autonomías españolas, consideran que el SDDR es un avance para el medio ambiente y el 62 por ciento opina que aporta más ventajas que inconvenientes. La consulta establece también la recogida y tratamiento de basuras como la segunda gestión de importancia de los ayuntamientos, por debajo solo del suministro de agua y por encima del alumbrado público, el transporte, la limpieza de parques y jardines y el asfaltado de calles y mantenimiento de aceras.

El SDDR establece en 25 céntimos de euro el precio de un envase de bebidas, de cristal o plástico, cuando se devuelve al punto de venta, donde se clasifica y entrega para su reciclado. En la actualidad, el Sistema Integrado de Gestión (SIG), responsabilidad de los ayuntamientos, se encarga a empresas de servicios que cobran por la recolección de residuos reciclados en origen por los mismos vecinos que pagan las tasas municipales con las que se financia el proceso.

Las cifras de 2008 de EUROSTAT, responsable de las estadísticas de la Unión Europea, señalan en 575 kilos la basura municipal que genera al año cada español, de los que se recicla solo un 14%. Un 9% se incinera, un 20% se utiliza para compostaje y el 57% termina en vertederos.