Nota de Prensa. 21/XI/2014

Smurfit Kappa inauguró esta mañana las nuevas instalaciones de Bag-in-Box® de Ibi, en las que se han invertido 28 millones de euros. La nueva planta, especializada en la fabricación de envases Bag-in-Box®, incrementará un 25% la capacidad de producción de Smurfit Kappa en esta actividad e integrará el cien por cien de los procesos de fabricación de estos embalajes.

Tony Smurfit, presidente y COO de Smurft Kappa Group, y Pascual Martínez, director general de Smurfit Kappa Ibi, inauguraron las instalaciones, acompañados por Saverio Mayer, director general de Smurfit Kappa Bag-in-Box, Roberto Villaquirán, CEO Smurfit Kappa Europa División Cartón, e Ignacio Sevillano, CEO Smurfit Kappa España y Portugal.

A la inauguración asistieron el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, acompañado por el consejero de Economía, Industria, Turismo y Empleo, Máximo Buch, el secretario autonómico de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua, Alfredo González, y el alcalde de Ibi, Rafael Serralta.

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El director de la planta, Pascual Martínez, quiso agradecer al Grupo Smurfit Kappa su apuesta por la planta de Ibi y se mostró convencido de que la nueva fábrica se desarrollará positivamente, optimizando el servicio a los clientes y haciendo llegar a los mercados productos de alta calidad que respondan con creces las expectativas de los clientes.

Las instalaciones, ubicadas en el Polígono Parque Tecnológico Ciudad del Juguete -a un kilómetro de la antigua planta- ocupan una parcela de 40.000m2, de los que 17.000 corresponden a superficie construida de fabricación. La plantilla de Smurfit Kappa Ibi ha aumentado en 43 nuevos empleos, alcanzando los 115 puestos de trabajo directos que se verán incrementados en el 2015 hasta los 130. La facturación anual prevista para este ejercicio es de 29 millones de euros, que prevén alcance los 38 millones en el 2015.

La planta está especializada en la fabricación de Bag-in-Box®, un embalaje medioambientalmente sostenible, destinado al almacenaje de líquidos o concentrados –una bolsa dentro de una caja, como señala su denominación en inglés-, que permite conservar inalterables todas las propiedades del producto, ya que la bolsa se contrae a medida que se vacía, impidiendo que entre aire y protegiendo y aislando el contenido, tanto de la luz como del aire. Es un envase seguro, versátil, cómodo y práctico, compuesto por cuatro films, un aro y un grifo.

Con esta nueva inversión, Smurfit Kappa se adelanta a las necesidades del mercado, aprovechando el potencial crecimiento de la industria del Bag-in-Box® ofrece un servicio óptimo a la creciente base de clientes de toda la región mediterránea. Se trata de una decidida y fuerte apuesta por el mercado español y europeo.

Este sector del embalaje representa un gran potencial de crecimiento para el Grupo Smurfit Kappa -primer productor europeo de Bag-in-Box®-, que cuenta con siete plantas de esta especialidad en todo el mundo, ubicadas en Francia, Italia, España, Rusia, Argentina y Canadá, que producen con alta calidad y tecnología de vanguardia. Los embalajes Bag-in-Box® se destinan principalmente a mercados del vino, productos lácteos y alimentos industriales.

La planta de Ibi de Smurfit Kappa Bag-in-Box exporta a más de una veintena de países, principalmente a Portugal, Grecia, Italia y Francia,  todos ellos países con gran tradición vinícola. En el caso de España, la planta cubre todo el mercado nacional. En este tipo de envase, la calidad es prioritaria, al tratarse de un embalaje que permite que el producto –el vino, fundamentalmente-, esté en perfecto estado de conservación durante meses, sin abrir el envase.

Aunque el destino fundamental de los envases fabricados ahora en Ibi es el sector vinícola, también se fabrica Bag-in-Box® para el mercado aséptico, es decir huevo líquido, nata, leche o cebolla líquida, y para concentrados de tomate, o para aceite de oliva, entre otros. La capacidad del Bag-in-Box® varía entre 1,5 L y 1000 L. Además, este embalaje de Smurfit Kappa permite prolongar el tiempo de conservación de los productos alimentarios varias semanas tras su apertura.